El Significado de los Mandalas

En la búsqueda de tener un espacio diferente conmigo misma, de disfrutar del silencio y encontrar una manera diferente de meditar y/o de relajarme, de activar esa energía interna o fuerza de vida que tenemos dentro y aprender a desarrollar desde el silencio todos esos preciosos sentimientos como el amor, la generosidad, la compasión, la paciencia y el perdón, que a veces olvidamos expresar; llegué a los Mandalas. Decidí comprar en el mercado un libro para colorear Mandalas y experimentar para ver qué lograba con ello.

Había escuchado sobre el valor que estos tenían en términos terapéuticos para las personas pero no tenía mucha más información, así que decidí leer un poco al respecto para poder sacarle más provecho a este nuevo territorio que había decidido explorar y hoy, lo comparto contigo. Porque esto no solamente es moda, sino que existe todo una mágica historia detrás de ello que ha transformado vidas.

¿Qué son los Mandalas? – Rito de Iniciación

Mándala es un término de origen sánscrito y que hace referencia a representaciones artísticas,  simbólicas, espirituales y rituales utilizados, primordialmente, en el Budismo y el Hinduismo.
Estos, en especial, son diseñados por los monjes budistas desde hace más miles de años y son representaciones artísticas sobre el suelo, hechas con arena de diferentes colores.

Luego de un largo periodo de trabajo -que puede ser días, semanas o meses- en donde se crea de manera minuciosa y artística una preciosa representación llena de colores, el mandala es “derribado” por quienes lo han hecho, pasando sus manos sobre el suelo, destruyendo todo. La arena que al final queda todo mezclada, es tirada al río para que fluya por el mundo como una bendición.

 

 

Este despliegue de imaginación total, estas creaciones de la mente de los monjes, tenían como objetivo crear realidades, sus realidades -que sus maestros les inclinaban a crear- que luego serían destruidas. Todo era magia. La magia de la creación de todo un universo para luego destruirlo, un universo que se convertía en realidad, que ayudaba a desarrollar la imaginación, a crear por uno mismo y que a la vez, también sanaba, a partir de su capacidad de abstracción, de meditación y creación.

 

Los Mandalas Terapéuticos

De acuerdo con expertos en el área, como la psicóloga transpersonal, terapeuta, escritora y autora de “El Mensaje Secreto del Mandala” quien por muchos años ha estudiado el tema de los Mandalas Terapéuticos, Ahimsa Lara Rivera, los mandalas son una representación del macro y micro cosmos, una potente herramienta de abstracción de nuestro interior, de lo que está oculto, de lo que está adentro que puede ser revelado amablemente, intentando reconstruir algo que, no importa que tan pequeño sea, pero que puede ser extraído a través del dibujo, habilidad básica que tiene el ser humano sin importar qué tan “bien” o “mal” dibuje la persona, sino que permia la creación de algo a partir de lo que va surgiendo en su interior, donde está el individuo, el yo, el otro yo desconocido; esto, con el objetivo de reconocer y sanar a nuestro “niño” interior”.

 

Reglas básicas para elaborar un Mandala

Con base en sus estudios en la escuela de Jung (Carl Gustav Jung, médico psiquiatra, psicólogo y ensayista suizo, quien es figura clave en la etapa inicial del psicoanálisis y posteriormente, fundador de la escuela de psicología analítica, también llamada psicología de los complejos y psicología profunda), Ahimsa Lara Rivera afirma que el tamaño ideal de los mandalas es un plato de postre, aunque pueden ser grandes y pequeños; de hecho los que hacen los monjes budistas ocupan una mesa y hasta más. Lo importante es que estos estén demarcados con el objetivo de establecer un límite para lo que va a “surgir” hacia afuera a través del mandala, y luego ahí retornar hacia el centro.

 

Beneficios para el Cerebro y Bienestar Personal

Los mandalas generalmente están rodeados de un cuadrado, triángulos y otras figuras que le ayudan al cerebro a rediseñarse, a replantear su historia y exponer algo que está dentro de uno.

En el caso de los Mandalas Terapéuticos, lo que se hace es –antes de empezar a dibujar y colorear, se le plantea una pregunta al mandala (o sea, al papel donde se dibujará) como por ejemplo “¿Quién soy?”, “¿Cómo me siento?”, etc.; y de allí, se empieza a crear. Todo lo que se crea está brindando algo de información,  está exaltando esas emociones (inclusive esas que nos enferman), está sanando tu interior y ayudándote a quitarte ese “peso” que a veces llevamos dentro.

El mandala en blanco, se divide en dos partes arriba-consciente y abajo-inconsciente, donde está lo oculto que no sabíamos que estaba ahí. Cada elemento tiene un significado, que en muchos casos varía dependiendo de la interpretación en términos culturales (hinduismo o budismo). Un significado que puede hablar sobre tu estado de salud y estado emocional.

 

Así que bueno, en medio de toda esta información, te invitamos a explorar en este nuevo territorio lleno de beneficios, a que crees tus propias realidades y aprendas -como nosotros lo estamos haciendo- a acoger a ese maestro que está dentro de uno, ese médico interior que tiene tanto por enseñarnos y así disfrutar de la magia de la existencia de la mejor manera.

¡Anímate!, empieza comprando un cuaderno de mandalas para colorear o compra un cuaderno en blanco y crea tus propios mandalas, aprende con nosotros y recuerda nunca dejar de ser niño.

 

Y, como siempre, que disfrutes del recorrido. 🙂

Con cariño,

 Ana y Juan.