Mocoa, el mundo, lo que hacemos y lo que olvidamos hacer.
Por supuesto que lo de Mocoa es una tragedia. Más de 290 muertos y 2.900 personas damnificadas. Por supuesto que hay que aportar. Y si no ha donado, hágalo.
PEEEERO, tampoco crea que porque donó con eso es suficiente porque no lo es. Lo de Mocoa es el resultado de todo el abuso que hemos tenido con nuestros recursos, con nuestro planeta.
.
Ahora, si quiere AYUDAR DE VERDAD-VERDAD y evitar, o al menos disminuir las probabilidades de que esto vuelva a suceder, pregúntese:
.
• ¿Aún me quedo en la ducha más de lo necesario?
• ¿Sigo sin reciclar en mi casa? ¿Aún ni sé cómo se hace correctamente?
• ¿Reutilizo lo que puede ser reutilizable?
• ¿Dejo las luces encendidas sin ni siquiera necesitarlo?
• ¿Llevo bolsas de tela para hacer mis compras?
• ¿Utilizo mi carro solamente cuando es necesario? ¿Lo comparto con mis colegas y/o familiares? ¿Uso la bicicleta o camino hacia su destino si es viable?
• ¿Cargo mi botella de agua reutilizable o sigo comprando a diario las botellas plásticas?
• ¿Intento elegir los productos con menos envoltorios?
• ¿Respeto y cuido de las zonas verdes?
• ¿Cocino solo lo que comeré y evito botar los “restos” a la basura?
.
En fin, las preguntas pueden ser interminables.
El punto es, como le escuché a alguien, “NOSOTROS NO ESTAMOS PARADOS EN EL TRÁFICO, NOSOTROS SOMOS EL TRÁFICO.”
.
A reflexionar, a pensar globalmente; pero sobretodo, A ACTUAR localmente y desde ya.
Ayudar, dar, darse, son verbos que reclaman acciones inmediatas, con ellas hacemos un mundo más justo y logramos nuestra propia felicidad. Es un tema con el que deberíamos convivir siempre. Amerita un tratamiento cotidiano. Felicitaciones por la pagina. Adelante hay mucho camino por recorrer